Para comenzar con esta reseña vamos a hablar un poco sobre el contexto que rodea la salida de este polémico juego desarrollado por el estudio Inti Creates y Comcept; bajo la dirección de Keiji Inafune, más reconocido por ser el creador de la franquicia Megaman.
El concepto de este juego nació en 2013, bajo la premisa de ser el heredero al trono de Megaman. Con dicha ilusión miles de fans en todo el mundo apoyaron la campaña de Kickstarter de Keiji Inafune y lograron superar la meta inicial estimada de 900 mil dólares; cerrando con un total de $4,046,579 de dólares que en teoría iban en pro de ofrecer mayores mejoras al título de las propuestas en primera instancia.
Este juego se esperaba fuera estrenado durante Abril de 2015, pero diversas circunstancias fueron provocando retrasos en el desarrollo, mismos que empujaron su lanzamiento hasta Junio de 2016. Más de un año de espera y mucha incertidumbre rodearon al estreno del que en un principio fue un juego que tenía a los fans con el hype a tope.
Trama
En términos generales su historia se basa en que de la noche a la mañana un virus informático corrompe a todos los robots, entre ellos, un escuadrón de elite llamado Mighty Numbers y solo Beck (Mighty No. 9) puede restaurar el orden con su habilidad especial para asimilar a sus contrincantes.
Este seguramente es el punto más flaco del juego, con una historia gris, que pareciera haber sido escrita en una noche de ocio, con personajes principales huecos, diálogos en su mayoría intransigentes y que solo están ahí para justificar que tienes que hacer algo y cumplir con algún objetivo.
Sin embargo, de lo poco rescatable es el hecho de que la historia gira en torno a salvar a tus oponentes del virus, en lugar de destruirlos, un guiño poco común en los juegos de hoy en día; lástima que el concepto no fue arropado de forma adecuada.
Jugabilidad
Nuestro personaje principal contará con el tradicional buster, pero conforme avancemos y derrotemos jefes de área iremos adquiriendo ciertas habilidades especiales llamadas Mighty Skills que irán enriqueciendo nuestro abanico de posibilidades en batalla.
Acompañando esto, Beck tiene la capacidad de realizar Dash en tierra y aire; esto es fundamental ya que varios niveles pondrán a prueba tus reflejos y buen control de esta habilidad.
Las batallas con los jefes de área suelen tener un nivel de dificultad medio; ya que ninguna logra ofrecer un reto abrumador que te haga «parir chayotes» como dirían en mi rancho. Pero si algunos te someterán al clásico ensayo y error, resultando en ocasiones ser una combinación exasperante con la dificultad de obstáculos que presentan algunos niveles.
La mecánica de puntajes y batalla en la habilidad para absorber a los enemigos cuando están debilitados por los ataques, dependiendo de ello aparecerá un marcador de % y además se acumulará en un contador de combos, esto conforme los realices de forma exitosa sin recibir daño.
Es el punto más destacado del juego, sin llegar a ser excepcional, el estilo de juego es bastante rápido y entretenido para el tipo de plataforma que pretende ser. Y conforme te acostumbres al control del Dash de Beck el juego se irá tornando cada vez más espectacular al tratar de hacerlo todo a máxima velocidad.
Escenarios y gráficos
Los escenarios estéticamente dejan mucho que desear en ocasiones, ya que hay lugares con muy pocas texturas y que incluso parecieran sin terminar de diseñar. Sin embargo, juego cuenta con una gran variedad de niveles, cada uno con retos bastante distintos; ya que podrás ir de plataformas resbaladizas con hielo, autos en movimiento, lugares en llamas e incluso derrumbes que te irán obstaculizando el curso.
Gracias a estos detalles, los escenarios suelen tornarse en pruebas de obstáculos que muchas veces te conducirán a la muerte; llegando en ocasiones a resultar más frustrantes que los mismos jefes de área. Esto en mi gusto es un punto a favor, ya que te proporciona la dosis perfecta de reto y corajes que todo buen plataforma debe inspirar en el jugador.
Gráficamente el videojuego queda por debajo de las expectativas, las cinemáticas carecen de vida e incluso ni siquiera se tomaron la molestia de proporcionarles movimientos de boca a los personajes durante los diálogos; felicidades volvimos a la ventriloquia del PS1. Sin duda, hubiera lucido mucho mejor tener cortos animados, similares a las que se usaron en Megaman X4, pero que se le va hacer.
Personajes
Los protagonistas son Beck y Call o más bien la reencarnación de Megaman y Roll respectivamente; contamos con rival/amigo cuyo estilo de combate, personalidad y aspecto nos recuerdan a Zero. Y también tenemos a dos científicos que nos acompañarán durante la aventura con sus «astutos comentarios» y diálogos tan profundos como las frases de Coehlo.
De de ahí en fuera, podemos rescatar el intento por ofrecer jefes de área con personalidades distintas, pero que pudieron haber impactado más en la historia si el concepto hubiera sido llevado mejor.
Un guiño bastante curioso, es que si eres fan del Anime podrás notar la presencia de seiyuu o actores de doblaje famosos por personajes como por ejemplo Jiraiya de la serie Naruto; entre el casting de voces japonesas que trae el juego.
En cuanto al diseño de personajes he de mencionar que en su mayoría son buenos, aunque bueno nunca falta el enemigo amorfo sin ton ni son. Si quieres echarle un ojo les dejo una galería donde podrán ver el diseño de todos los jefes de área disponibles en Mighty No. 9.
Soundtrack
Es imposible dejar atrás uno de los puntos que más nombre le dieron a la saga desde sus inicios en la NES, ya que Megaman desde siempre nos ha tenido acostumbrados a soundtracks memorables.
En el caso de Mighty No. 9, aunque no puede ser nombrado como una pieza maestra, su OST es bastante bueno y ameno para acompañar las frenéticas aventuras de Beck.
Conclusiones
Si dejamos de lado que este viene a ser el sucesor espiritual de Megaman el juego podría considerarse un poco más que bueno, ya que cumple con la premisa de entretener, ofrecer un nivel de reto aceptable y tener un estilo de juego rápido que resulta adictivo.
Lamentablemente la sombra de las obras anteriores de Keiji Inafune y el enorme aporte de los beneficiarios en Kickstarter han hecho que la vara de calidad esperada sea demasiado alta para este juego, llegando a no cumplir con las expectativas del público.
Sin embargo, si no eres prejuicioso y gustas por el estilo de juego plataforma 2D; te recomiendo que le des una oportunidad a Mighty No. 9 cuando se presente alguna buena oferta de 50% de descuento o más.